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TRAINSPOTTING CUMPLE 25 AÑOS DESDE SU ESTRENO

Trainspotting, la película del director Danny Boyle, cumplió 25 años desde su estreno el pasado 23 de febrero. Sin duda es una de las obras cinematográficas que nos siguen volando la cabeza y que nos hacen reflexionar al máximo.

Para rememorar su aniversario, te compartimos una serie de curiosidades sobre la cinta que seguro harán que veas el filme con otra mirada:

  • Está basada en una novela.

Trainspotting se basó en la novela homónima publicada en 1993 por Irvine Welsh que lleva el mismo nombre de la película.

Tiene una de las escenas de introducción más icónicas del cine.

  • El soundtrack es increíble. La música es un elemento fundamental que acompaña, si no todas, la mayoría de las secuencias. Trainspotting es básicamente una selección del mejor indie de los noventa, donde encontramos perlas de Blur, Pulp y Elastica, completándose con la más conocida «música máquina».

 

  • ¿De dónde viene el nombre? El nombre de Trainspotting tiene varias aplicaciones: una se refiere a las lesiones que crean las inyecciones de heroína, dejando una especie de “vía de tren”, la cual los adictos tienen que identificar para que la inyección sea menos dolorosa. La otra se refiere a un término inglés para estar obsesionado con datos inútiles, como trivia de James Bond o de fútbol.

 

  • Existe una secuela. Trainspotting 2 fue estrenada en 2017 y da seguimiento a la historia de los personajes principales 20 años después a los sucesos de la primer entrega.

 

  • Se encuentra en el top de películas independientes más importantes. La película costó 2.5 millones de dólares. Es la 11 película independiente más exitosa de todos los tiempos en el Reino Unido. Fue la cinta británica más exitosa de 1996.

 

  • La singularidad sonora del escocés es un activo en la novela -donde se suman las jergas- y de la propia película. Lograron que gustase en Inglaterra, país de Boyle, donde los escoceses (país de Welsh y Hodge) no son precisamente queridos por su acento. Una curiosidad es que los 20 primeros minutos del film, en los que se desarrolla el también icónico discurso de Renton, fueron subtitulados en Estados Unidos para evitar que el público norteamericano abandonara las salas de cine por no entender nada.

 

  • Antes de ser película, la historia fue llevada al teatro. Trainspotting inició un camino en los teatros que seguiría años más tarde. El actor que daba vida a Renton era Ewan Bremmer que, finalmente, se reconvertiría a petición propia en Spud.

 

  • Fue nominada a los Óscares.  El trabajo de Hodge para Trainspotting le valió la única nominación de la película para los Oscar, pero no hubo suerte.

 

  • El escritor de la novela aparece en el filme. Welsh hace un cameo en la película como traficante de unos curiosos supositorios para Renton. Más allá de lo anecdótico, el autor se mostró infranqueable cuando Mcdonald y Boyle le presentaron un primer proyecto con trazas intelectuales.

 

  • «Elige la vida». La introducción de la película, el discurso ‘Elige la vida’ de Renton, es uno de los posters cinematográficos más vendidos de la historia. Y eso que no es el póster original del film, otro de los más recordados de la época.

 

  • El director buscaba caras frescas.

Boyle buscaba actores sin experiencia para llenar de frescura juvenil la película. Lo logró con McKidd y también con Kelly Macdonald, la joven intérprete que dio vida a Diane, una adolescente de 14 años. Macdonald, de 19, fue la elegida tras un larguísimo casting de actrices inexpertas, aunque ha sido una de las que a posteriori más actividad ha tenido en el cine después de Trainspotting.

 

  • Se inspiraron en diferentes películas.

Para tratar de motivar el espíritu de juventud y rebeldía, Boyle organizaba sesiones de cine con los actores y les facilitaba una corta lista de películas entre las que se encontraba The Hustler (Robert Rossen, 1961), La naranja mecánica (Stanley Kubrick, 1971) o El exorcista (William Friedkin, 1973).

 

  • El póster oficial es obra de Marcos Blamire y Rob O’Connor.

Aunque al principio se les invitó a imitar una imagen promocional de The Beatles en la que los Fab Four aparecían apiñados, lo cierto es que estos diseñadores apostaron por una muestra individual de los personajes. Ellos mismos reconocen que en aquel momento, cuando Carlyle y McGregor eran -y no tanto- conocidos, fue algo «arriesgado». Sin embargo, O’Connor apuntó en 2011 a Creative Review que «la novela de Welsh está escrita desde diferentes puntos de vista y nos pareció importante hacer hincapié en esa individualidad de las personalidades».

 


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